jueves, 8 de septiembre de 2011

Escribiendo después de un tiempo...

           Llevo muchísimo tiempo sin acordarme de este rinconcito que me inventé, desde entonces solo me ha servido para contar un par de anécdotas que me apetecía dejar aquí, para recordarlas. Los pececitos azul y amarillo llevan mucho tiempo sin comer, no me he acordado para nada de ellos, aunque prometí hacerlo. Cuando era pequeña me pasaba lo mismo, los peces que mi madre me compraba  por mis caprichos, morían en un par de días porque me cansaba de mirarlos, entonces dejaba de cuidarlos o jugaba con ellos de mala manera. Al poco tiempo volvía a pedir otro pez  a mi madre. 

         Creo que me pasa lo mismo con todo y posiblemente me pase toda la vida. Me ilusiono con cualquier cosa, paso un tiempo pensando prácticamente solo en ello, más tarde me cansa o me agobia sentirme muy  pegada y lo dejo un poco de lado o lo olvido, para después echarlo de menos. A veces con suerte puedo volver a recuperarlo, como los viejos cd`s de música antigua que he vuelto a buscar ahora, todavía me encantan todas las  canciones que grabé hace años. Otras veces, las cosas no permanecen donde las dejé, porque no son cosas, son personas. 

"Todo lo que pudimos recoger
después de la derrota
es esta promesa.
Nosotros sabemos lo que contiene,
la lista de normas de un pequeño
código de honor de derrotados
apenas válido para no
deshacernos, y desde luego incapaz
de mover a construir nada.
Es un templo de piedras rescatadas
de entre las ruinas de la tormenta
pero aún así dentro arde
nuestra pequeña candela"

                               José Daniel Espejo. 
        

No hay comentarios:

Publicar un comentario